Desde el lanzamiento del primer ordenador personal al mercado, en 1964, la humanidad ha presenciado grandes avances tecnológicos como lo son el internet, el wifi, los drones y robots, haciéndonos la existencia cada vez más fácil; pero, hoy en día nos enfrentamos al avance más grande de todos ellos, hasta el momento, damos cara a una nueva tecnología que a muchos hasta nos puede parecer una amenaza: La inteligencia artificial.
Ahora, la inteligencia artificial (IA) toma el lugar de novedad que alguna vez tuvo un ordenador, siendo esta la rama de la informática que busca desarrollar algoritmos, sistemas y técnicas que permitan a las máquinas aprender y realizar tareas que, hasta ahora, sólo podían ser realizadas por nosotros los seres humanos, como el reconocimiento de voz, la toma de decisiones, la traducción de idiomas, la percepción visual, la generación de contenido como imágenes, textos, etcétera.
Con todo esto, ¡Cómo no nos podemos sentir amenazados! entonces surge la gran pregunta que anda rondando en nuestra tan preciada red: ¿La inteligencia artificial reemplazará al ser humano en un futuro no muy lejano?, en mi opinión la respuesta es: Sí y no.
Antes de la iA
Vamos a finales del siglo XIX, cuando los diseñadores creaban carteles publicitarios con elementos y técnicas traídas de disciplinas como la arquitectura; eran trabajos manuales que costaban mucho dinero entre materiales, personal, instalaciones, etc., sin mencionar el tiempo de producción o reproducción.
Con la llegada del siglo XX y la aparición de Adobe y sus magníficos programas de diseño, ¿Qué pasó con aquellos artistas gráficos? Muchos habrán pensado: “Poco a poco nos irán reemplazando” y en realidad, fue así, bueno, no a todos, solo a los que no se sumaron al gran cambio; porque la tecnología no está aquí para reemplazar, sino para optimizar los procesos y así el ser humano tenga más posibilidades de creación; pero el reto está en dominar al monstruo que te causa el miedo y ser tú su dueño, ¿y cómo lograrlo? Pues aprendiendo a usarlo, volviéndote un monstruo más grande con él de tu lado.
Lo mismo pasa con la inteligencia artificial; desde que salió escuché muchas voces del posible reemplazo, pero no pienso que sea así, esta ha llegado como una herramienta más que nos ayuda a crear de manera rápida muchos recursos que usamos día a día, los cuales, se deben corregir y perfeccionar dándoles el enfoque que se requiere, ya que al ser “artificial” esta inteligencia, no logra la calidad que busca el ser humano y que solo otro humano sabe lograr.
Inteligencia artificial como aliada
La inteligencia artificial se ha convertido en una de las herramientas de ayuda más poderosas para los diseñadores gráficos, nos ha ayudado a automatizar ciertos aspectos del proceso de diseño, como la selección de colores o las fuentes tipográficas; por ejemplo, en el caso de la comunicación interna organizacional, cuando realizamos los comunicados para las empresas con las que colaboramos, hacíamos búsquedas implacables de fotos que nos tomaban horas, ya que estas empresas requieren fotografías de personas de nuestra región con características que son algo difíciles de conseguir en bancos de imágenes que son mayormente norteamericanos o europeos; entonces la inteligencia artificial llegó para hacernos la vida más fácil y nos dijo a lo Alf: “No hay problema”, con solo colocar en el cuadro de relleno generativo del nuevo Photoshop Beta la indicación adecuada, voilà, le cambiamos el rostro a la modelo elegida por una con rasgos característicos de nuestro lado del hemisferio, luego corregimos y afinamos la imagen final para que quede como queremos; sencillamente hermoso.
¡Adiós! al tiempo perdido en scrollear y scrollear buscando la imagen ideal, ¡Hola! optimización del tiempo para un proceso eficiente.
En conclusión
Aunque la inteligencia artificial se base en algoritmos muy precisos como el ya mencionado, esta no podrá replicar nunca la creatividad y la intuición humana, ya que, en el caso de un diseñador, este se especializa en la creación de diseños que se ajusten a las necesidades de cada cliente y lineamientos de cada marca para que éste logre la conexión deseada con su audiencia y esto solo lo puede lograr un buen equipo de seres humanos trabajando lado a lado con la tecnología y las bellas herramientas que ésta nos ofrece, un claro ejemplo de una de ellas es el nuevo Adobe Express (Beta) que nos ayudó a crear las imágenes que adornan cada sección de este post.
Tal vez en un futuro muy, muy, muy lejano, a partir de unos cuantos prompts, la inteligencia artificial nos sorprenda con diseños completos, con una lectura correcta del manual de marca, con la diagramación correcta de la jerarquía gráfica y con los colores pantone indicados, aun ante toda esta perfección, no teman estimados diseñadores, comunicadores y demás colegas porque recuerden: aunque la inteligencia artificial lo termine haciendo todo, siempre necesitará a alguien que le diga qué hacer.
Consuelo Paredes Nuñez / Directora gráfica